La imagen que he elegido para inaugurar el tema va mas allá del concepto de una simple customización, ya que se trata de una auténtica obra de arte en su mas pura concepción...
Señores, disponeos a caer de rodillas y persignarse la señal de la cruz sobre frentes, caras y pechos, tal como se ha tenido siempre por costumbre hacer cuando se contempla un milagro, modalidad de hecho maravilloso a la que pertenece por derecho propio lo que se ve en esta foto:




(para ampliar, hacer clic en la imagen)