En primer lugar realizamos unas fotos del interior del depósito para poder comparar los resultados. Se puede apreciar corrosión superficial y oxido por todo el depósito.


El agujero redondo en forma de “ombligo” es el interior de la rosca del grifo de gasolina.

Introducimos el vinagre, en esta ocasión he utilizado dos litros, también se introduce un buen puñado de tuercas y tornillos para que al agitar ayude a remover la suciedad.
IMPORTANTISIMO: Contad bien todas las tuercas y demás que le metais por que se suelen quedar enganchadas, y luego crees que las has sacado todas cuando aun te quedan 4 o 5…



Dejamos actuar varios días, moviendo de posición y agitando enérgicamente el depósito de vez en cuando.
Vinagre después de dos días actuando.


Se vacía su contenido a los 2, 3 o 4 días, según veamos el resultado.
IMPORTANTISIMO: Contad bien todas las tuercas y demás que le sacais por que se suelen quedar enganchadas, y luego crees que las has sacado todas cuando aun te quedan 4 o 5…
Depósito recién vaciado de su contenido, se observa suciedad.
Se lava a conciencia con agua a presión.


Se seca con aire comprimido.
Se verá que se oxida con una rapidez asombrosa, por lo que hay que pararla con aceite en spray tipo 3 en 1. Hay que ser generosos en su aplicación.

Y el resultado final es este.


Cada cual que juzgue si merece la pena esta forma de limpieza o con productos más comerciales y específicos.
Por: Enrique Carrasco